viernes, 4 de noviembre de 2016

Don Alejo Corazón no estaba muerto sino de parranda

Con amor todo se puede alcanzar
Hola amigos, aquí estoy otra vez y en Venezuela, aunque pareciera que estaba esfumado del escenario, he vuelto a aparecerme por aquí, y aún me dicen Don Alejo Corazón.Pronto les traeré nuevas vivencias. Si ya se. Quieren saber ¿donde estaba, cómo, con quien, cuando, por qué y para qué?. ¡Paciencia! Estaré en los días por venir publicando de nuevo videos y mis cotidianas aventuras. Sólo quería saludarlos. Darles un testimonio de vida. Contarles que sigo enamorado, envejeciendo con alegría disfrutando de la vida y de la gente tanto o más que antes. Es obvio que a mi como a cualquier otro, le afectan también los problemas cotidianos. La crisis económica venezolana, no es cosa fácil de sortear. Sobrevivir ya es una gran azaña; pero estoy  muy bien.

En el plano espiritual me encuentro muy feliz, estoy compenetrado infinitamente con Dios y nada parece afectarme, sigo con mi amada viviendo un cálido romance y nada soy sin ella. 

El diario vivir es así: Trabajo diario. Pero entonces viene el trajinar a dificultar las cosas: Que si me hurtaron la batería del carro, pero no logra eso detenerme, ni me lamento, ¿para qué?, enseguida  la dinámica de la vida me coloca la posibilidad de encontrar otra de manera milagrosa. Que no encuentro cauchos para el vehículo, listo, aparece una chiva por alguna parte y sigo rodando por las calles de las ciudades. Que no tomo mi bebida o el refresco favorito porque los precios son elevados, tampoco me efecta porque encuentro en seguida el lado bueno de la vida y calmo la sed de algún modo sabroso. 

Físicamente me encuentro más fuerte y más delgado y en forma que nunca. Hoy estoy en la línea, así repitem aquí cuando alguien reduce de peso; que estoy muy bien me  dicen las damas más cercanas, al ver mi reducido abdomen y mis nuevos trajes a la medida desempolvados recien sacados del viejo armario. ¿El lado bueno de reducir cintura y libras de peso es que recuperas toda la ropa buena olvidada en un rincón; pero lo negativo es que pierdes la ropa ancha. Si ya se, volví mas frívolo y superficial que antes ¿Cómo le hago? recuerden que soy odiosamente hedonista y el placer de mi amor propio inhive mis buenas intenciones. A este señor no parece importarle más nada sino él me dirán ustedes. No es verdad, me importa el mundo, su gente, el sufrimiento general, pero hoy no pienso gemir de dolor públicamente. Ni cuando murio mamá les lloré en públivo. Así que nada me hará sacar una lágrima, solo risas de felicidad. Un abrazo a todos, aquí regresé, "no estaba muerto sino de parranda" (aseguran quienes fueron creidos fallecidos y resucitaron, esta no es un resurección, sino una posibilidad para reencontrarme con lo amado y quiero celebrarlo parrandeando. "Esta noche amanecemos, amanecemos parrandeando" así es  el estribillo hermoso de la canción aquella verdad?. Epa chicas, espérenme, hoy es viernes, y no quiero quedarme en casa. ¡Muchachas! ¿a donde vamos hoy a bailar?. Ahorita vengo voy a salir.¡A beberrrr¡